[cont] Tras una breve discusión, me coge la copa y la lleva adentro diciendo que me la cambia (que ni siquiera era mi intención). Pero cuál es mi sorpresa, cuando veo que sale el otro camarero (el que había preparado la copa), se acerca a la mesa ¡¡con la misma copa que me habían puesto antes!! y dice en tono chulesco: "ron con cola, ¿verdad? pues está perfectamente". La deja en la mesa y se va. No dábamos crédito. Como dije al principio, fue el trato más humillante que recibí en mi vida en un establecimiento. Por supuesto, nos cobraron todo y apenas hubo un tímido amago de disculpa, manteniendo la actitud de prepotencia. Una escena grotesca, lamentable y realmente increíble que ocurrió como respuesta a una queja que expresé con respeto y educación.